En un post anterior, ya comentábamos la situación actual en cuanto a la adicción tecnológica a juegos online en el público cada vez más joven. Desde Levanta La Cabeza de FunSalud queremos sensibilizar de los riesgos de iniciar a los más pequeños en los juegos de azar desde edades tempranas y sin supervisión ni control parental. Los estudios reflejan cómo el común denominador en la historia de vida de las personas con ludopatía es un contacto en edades tempranas con los juegos de azar. Como padres, hemos de prestar atención a nuestros teléfonos móviles y tomar precauciones en el uso que hacen nuestros hijos de ellos, ya que muchos de los juegos de apuestas online están camuflados tras imágenes infantiles de protagonistas o princesas populares entre los más pequeños, que sin darse cuenta se pueden encontrar jugando con solo tocar a uno de sus personajes favoritos de Disney.
Por tanto, para prevenir el desarrollo de la ludopatía es fundamental concienciar sobre los peligros, ofrecer alternativas a los juegos de azar, regular y supervisar los tipos de juegos y el tiempo que emplean en ellos así como establecer herramientas de control parental en nuestros teléfonos móviles para evitar que nuestros hijos más pequeños puedan acceder a según qué tipo de plataforma de juego online.
Intentemos promover el uso de juegos presenciales con otros iguales y basados en la creatividad, la imaginación, el razonamiento o la exploración, más que en juegos basados en la recompensa inmediata y la gratificación a través del “bonus” o premio. Intentemos también favorecer que nuestros hijos disfruten con juegos donde la gratificación sea la compañía, así como las risas y el buen rato que pasan con sus amigos o familiares, más que el refuerzo inmediato de una pantalla.
La ludopatía tiene el mismo origen que otro tipo de adicciones con o sin sustancia. Como ya explicamos en un post anterior sobre las bases neuropsicofisiológicas de la adicción tecnológica, afecta directamente a nuestro sistema de recompensa activando neurotransmisores que producen sensaciones de placer y bienestar. De este modo, puede ser la salida de muchos jóvenes para contrarrestar sentimientos de vacío o sensaciones de malestar provocados por distintas situaciones complicadas que puedan estar viviendo.
A continuación detallamos algunos indicadores o señales de alerta que pueden reflejar que se esté padeciendo un problema con el juego.
- Obsesión por el juego y todo lo relacionado con él. Presencia de ideas recurrentes y un examen compulsivo de estrategias, tiempo, lugares o momentos para conectarse y jugar.
- Pérdida de interés por otras actividades.
- Irritabilidad, ansiedad e insomnio, así como otros problemas emocionales.
- El juego como alternativa para manejar las dificultades: un recurso con el que escapar de una realidad que es dolorosa o complicada para el menor. El juego se convierte en el refugio donde evadirse de un problema.
- Cada vez se va aumentando más el tiempo dedicado a jugar, así como la cantidad económica invertida y la deuda acumulada.
- Problemas en la economía personal y familiar, fruto del descontrol en las apuestas, con la consiguiente dificultad de hacer frente a los pagos.
- Para costearse el juego o hacer frente a las deudas, la persona recurre a robos u otros comportamientos delictivos, que pueden acarrear medidas judiciales.
- Mentir reiteradamente respecto al gasto y la ocupación del tiempo.
Todo ello determina un deterioro de sus relaciones familiares, sociales y personales, alterando toda el área afectiva y desestabilizando a nivel global el desarrollo del menor. A corto plazo, presentará problemas emocionales, relacionales y de adaptación en su día a día. A medio-largo plazo, esta adicción puede desembocar en problemas de salud mental de importante gravedad.
Por tanto, si te identificas con alguno o varios de estos síntomas o bien observas en tu hijo u otra persona de tu entorno alguno de ellos, te recomendamos que contactes con nosotros, desde el proyecto Levanta la Cabeza de FunSalud podemos ayudarte. No te lo pienses más y contacta.
Marta Vicente Álvarez | Psicóloga especialista en psicoterapia con niños, adolescentes y adultos.